Hito
Iglesia de la Trinidad
Aunque no se conserva nada del edificio original, el Convento de la Santísima Trinidad fue una de las fundaciones del rey Fernando III, tras la conquista de la ciudad en el siglo XIII. Con la desamortización pasó a usarse como cuartel y su iglesia se convirtió en la Parroquia de San Juan y Todos los Santos. Atribuida al arquitecto Francisco Hurtado Izquierdo, fue iniciada a mediados del siglo XVII. En la fachada principal sobresale la portada, fechada en 1703, destacando en el segundo cuerpo la presencia de la columna salomónica, usada por primera vez en Córdoba. La iglesia se erigió pronto en el prototipo de iglesia barroca. Es de una sola nave de altos muros cubierta por bóveda de medio cañón y lunetos con ventanas. El retablo, encargado en 1724 a Juan Fernández del Río, con ornamentación exuberante y realizada con gran minuciosidad, es la obra cumbre del barroco cordobés.
Un pequeño cuarto existente en su sacristía tiene la particularidad de estar decorado con pinturas de Antonio Palomino muy valiosas.